Recorrer en bicicleta el meandro del Ebro es una opción de actividad de deporte en familia por un recorrido con carril bici y territorio llano
Durante el trayecto podréis disfrutar de algunos espacios icónicos de Zaragoza como es el Parque del Agua
Texto de Armando Cerra
Aquí os proponemos una actividad para toda la familia que podéis hacer cualquiera de estos domingos: recorrer en bici las dos orillas del meandro de Ranillas. En realidad, parte de itinerario ya ha aparecido en nuestros artículos dedicados a las 22 rutas de ZaragozaAnda, aunque aquí os invitamos a variar ligeramente el recorrido. ¡Así podéis repetir!
Lo cierto es que la podéis hacer cualquier día, pero se nos ha ocurrido que el domingo es un día perfecto. Sobre todo para aquellos que gusta hacer alguna que otra compra en el Rastro del Parking Sur de la Expo. Y es que allí precisamente comenzaremos a dar pedales junto al río Ebro. ¿En qué sentido? Ahora lo vamos a remontar, dejando el Puente del Tercer Milenio a nuestra espalda.
Ni que decir tiene que contáis con carril bici y el recorrido es absolutamente llano, por lo que no requiere de gran esfuerzo. Todo lo contrario es un paseo muy agradable. De hecho, no estaréis solos, ya que con que luzca un poquito el sol, por este itinerario nunca falta gente caminando, en bici, haciendo running o sencillamente contemplando las vistas, que son realmente atractivas.
Nada más pasar el tramo en paralelo al parking sur, se gira hacia el norte y pedaleamos junto al Parque Deportivo Ebro, cada vez más frecuentado. Y una vez que se acaba la tapia de este recinto os parecerá que estamos muy lejos de una ciudad de casi 700.000 habitantes como es Zaragoza. De pronto se olvida prácticamente del tráfico y la contaminación para contemplar el entorno.
A nuestra derecha el cauce del Ebro y en la otra orilla el verdor del bosque de ribera con el hito metálico de la Torre del Agua dominando el panorama. A nuestra izquierda solo hay campos de cultivo y un horizonte llano. Mientras que al frente nos queda el escarpe de yesos que parece proteger Juslibol y que se prolonga durante kilómetros flanqueando varias localidades de la Comarca de la Ribera Alta del Ebro.
Remontamos el río sin notarlo y de pronto hemos llegado a la altura de la autovía. Y por ella hemos de cruzar a la otra orilla. Pero que nadie se asuste. Ya hemos dicho que es una actividad para hacer con los peques, así que no hay que dar pedales junto al veloz tráfico. En paralelo y separado del asfalto para coches y camiones existe una pasarela habilitada para el carril bici y los peatones. Un buen lugar para valorar la destacable anchura del río y contemplar la curva que forma el Meandro de Ranillas.
La verdad es que en cuanto cruzamos el río y llegamos a la margen izquierda, el panorama cambia por completo. Ante nosotros queda el ACTUR y es visible la extensión urbana de Zaragoza. Desde este mismo punto, podríamos tomar un ramal directo al interior del Parque del Agua, pero os invitamos a seguir por el carril bici que discurre la avenida José Atarés.
Si vais por aquí, veréis al otro lado de la avenida el CDM Siglo XXI, uno de los centros deportivos más modernos de la ciudad. De hecho se construyó en 2007, prácticamente en paralelo al gran protagonista que nos va a acompañar en la próxima parte del recorrido: el recinto de la Expo.
A la derecha, muy pronto se empiezan a distinguir los edificios de la Expo Internacional de 2008, como el que albergaba todo el mecanismo hidráulico para el abastecimiento del parque, incluyendo la gigantesca noria siria.
Pasamos todo ese rosario de edificaciones y ya llegamos a la conocida como rotonda de las banderas. Ahí giramos la derecha para circular viendo el antiguo Pabellón de Aragón, el de España en el interior y todos los bloques que se han aprovechado para dependencias oficiales. Además de ver los famosos cacahuetes, que próximamente volverán a la vida en forma de apartamentos.
Todo eso si miramos a nuestra izquierda, pero si giramos la cabeza a la derecha volvemos a ver el Parque del Agua del que ya os hemos hablado en otras ocasiones. Y por supuesto desde aquí contemplamos una perspectiva de la Torre del Agua distinta a la vista al otro lado del Ebro.
Sin duda, para todos los que disfrutamos de la Expo 2008 se trata de un recorrido muy atractivo, ya que no paran de llegar recuerdos de esos meses. Y para aquellos que no la vivieron, siempre les podemos contar como fue aquel evento.
En definitiva que sin darnos cuenta estamos ya otra vez preparados para cruzar el río. Ahora por uno de los puentes sobre el rio Ebro más fotogénicos de Zaragoza y más usado para spots publicitarios. Se trata del Puente del Tercer Milenio que cuenta con su preceptivo carril bici para circular con seguridad. Por cierto, desde este punto también se ve otro recuerdo de la Expo reabierto recientemente. Ya lo habéis adivinado, nos referimos al hermoso Pabellón Puente.
Y así, casi sin sudar, disfrutando de las vistas hemos concluido el recorrido en bici por el meando de Ranillas en el mismo sitio que lo hemos comenzado.