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Cinco sitios que ver en la Comarca de la Ribera Baja del Ebro

A un paso de la ciudad de Zaragoza, la Comarca de la Ribera Baja del Ebro alberga rincones a veces desconocidos: os contamos los más característicos

Texto de Armando Cerra – Imágenes de Turismo de Aragón

Si ayer os hablábamos de los mejores lugares que se pueden visitar en la comarca de la Ribera Alta del Ebro, hoy es el turno de hacer una propuesta similar pero recorriendo los sitios de visita imprescindible en la Comarca de la Ribera Baja del Ebro. O sea, aguas debajo de la ciudad de Zaragoza.

Un territorio que queda a un paso de la capital maña y que a veces desconocemos pese a la cercanía. De manera que os animamos a aprovechar cualquier fin de semana de buen tiempo y daros una vuelta por esta zona. Estamos seguro que os sorprenderá y más aún si visitáis los destinos que hemos seleccionado para vosotros.

MONASTERIO DE RUEDA

Estaba claro que al hablar de los sitios que hay que ver en la Comarca de la Ribera Baja del Ebro no podía faltar el impresionante Monasterio de Rueda. Es el tercer vértice del mejor arte cisterciense de Aragón, comparable con otras joyas de la provincia de Zaragoza como el monasterio de Veruela o el monasterio de Piedra.

En este caso se encuentra a las mismas orillas del río Ebro, y esas aguas son su razón de existir, ya que regaban las tierras de los monjes y también hacían girar la enorme rueda que da nombre al cenobio. Solo por ver esta joya hidráulica ya merece la visita. Pero una vez que se está allí, hay que aprovechar para visitar el conjunto monumental. E incluso, ¿por qué no? Alojarse en la Hospedería Monasterio de Rueda, una buena base de operaciones para descubrir el resto de lugares que hay que ver en la Ribera Baja del Ebro.

VELILLA DE EBRO

La huella romana en Aragón es abundante. Y en Velilla de Ebro hay un ejemplo fabuloso de ello. Fue aquí, en un cerro que domina las vistas, donde en el año 44 a.C. se asentaron las legiones romanas de Marco Emilio Lépido y fundaron la colonia Vitrix Iulia Lepida. Por supuesto, todo aquello hoy en día es una ruina, o más bien un estupendo yacimiento que proporciona una visita muy interesante.

Pero ya que se ha llegado hasta allí, aprovechad para daros un paseo por la actual Velilla, sobre todo para visitar sus dos templos más carismáticos, la iglesia parroquial de la Asunción y la ermita de San Nicolás de Bari, donde se guardan partes de arquitectura románica y donde antaño hubo un retablo del gran Damián Forment, el mismo escultor que trabajó en el Altar Mayor del Pilar o en la Catedral de Huesca. Si bien, el retablo que hizo en Velilla se perdió durante la Guerra Civil.

QUINTO DE EBRO

También la capital comarcal es uno de los sitios que hay que ver en la Ribera Baja del Ebro. Nos referimos a Quinto de Ebro. Un lugar a poco más de 40 kilómetros de Zaragoza y que desde hace unos pocos años es uno de los sitios que más suena en las campañas turística. ¿Por qué? Porque ahí se abrió el único museo de momias que hay en toda España.

Este museo se sitúa dentro de la iglesia de la Asunción, más popularmente conocida como El Piquete. En este templo se llevó a cabo una profunda restauración, y fue entonces cuando aparecieron un conjunto de cuerpos momificados de los siglos XVIII y XIX. Un patrimonio único que se decidió conservar y exponer. ¿Lo has visitado? Te animamos a que lo conozcas.

ESCATRÓN

El Monasterio de Rueda, en el municipio de Sástago, ha sido el comienzo de nuestro recorrido por los sitios que hay que ver en la Ribera Baja del Ebro. Pues bien, justo en la orilla de enfrente se encuentra el pueblo de Escatrón. De hecho, tradicionalmente Escatrón y Sástago tenían sus riberas unidas mediante una barca de sirga, clave para la comunicación en las épocas en la que no había tantos puentes.

También hay una leyenda que habla de un túnel bajo el río que unía Escatrón con el Monasterio. Algo de lo que no hay pruebas. En cambio, sí que existen vestigios de uno de los primeros puentes que hubo por este territorio. Se trata del viejo puente romano a las afueras de Escatrón. Y eso no es más que el comienzo de su riqueza patrimonial. También merece la pena ver la iglesia de la Asunción, el Palacio Renacentista reconvertido en centro cultural, la Casa de los Abades o la ermita de Santa Águeda.

LOS MEANDROS DEL EBRO

Otro lugar que merece la pena conocer en Escatrón es el Fortín en el cabeza Mocatero. Desde ahí se dispone de una bella panorámica del río y de su divagar por el paisaje. Una de las cosas que más admiran al visitar la Ribera Baja del Ebro es precisamente el discurrir del río. Son diversos los miradores que ofrecen estas estampas tan atractivas.

Algo que se aprecia de maravilla a vista de pájaro. Mientras que con los pies en el suelo, junto a las mismas orillas, se tiene la visión más humana del río. Fuente de riqueza y también vía de comunicación. Todavía en Cinco Olivas, Alborge, Gelsa, Alforque y otros puntos de la comarca se guardan las huellas de embarcaderos, barcas de sirga, molinos o canalizaciones varias. Irlas descubriendo con calma es uno de los atractivos de esta escapada por la comarca de la Ribera Baja del Ebro.

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