Las Gemelas Atómikas han anunciado su retirada del pádel profesional: “La única espinita que nos puede quedar es no haber disputado unos Juegos Olímpicos”
Mapi y Majo. Majo y Mapi. El orden no importa. Las Gemelas Atómikas se han convertido en historia del pádel profesional en conjunto. Zaragoza y Aragón no podían haber tenido un mejor representante de valores como el sacrificio, el esfuerzo o el fair play. El resultado han sido victorias, victorias y más victorias, traducidas en 32 títulos World Padel Tour y colocarse como números 1 del panorama durante cuatro temporadas. Casi nada.
Ayer anunciaron su retirada del circuito profesional a final de temporada, por lo que no hemos querido desaprovechar la ocasión para charlar con ellas. Una entrevista donde no nos centramos únicamente en su retirada, sino también en sus inicios, sus años de gloria, sus momentos más especiales y, cómo no, sus futuros proyectos.
P. Vuestra andadura en el pádel profesional comenzó hace 15 años. ¿Cómo se produjo la entrada en un deporte que por aquel entonces no era tan conocido?
Empezamos a jugar por casualidad. Nosotras habíamos dejado hace años el deporte de raqueta (tenis) y estábamos estudiando Trabajo Social en Zaragoza. Un día, unos amigos nos invitaron a jugar al pádel. Empezamos a jugar con más asiduidad, pero realmente era un hobbie para nosotras.
P. Visionarias de un deporte de éxito que no para de crecer, ¿cuál creéis que es el techo del pádel?
El pádel no para de crecer, tanto en España como en el resto del mundo, sobre todo en Europa y América Latina. Cada vez hay más pistas, más clubes, más gente que juega, niños y niñas que quieren ser profesionales… Todo eso hace que el pádel siga creciendo, se vaya profesionalizando aún más, se le de más visibilidad en los medios… Hoy por hoy, ¡este deporte no tiene techo!
P. La noticia de vuestro adiós a una vida dedicada al pádel profesional ha dado la vuelta al deporte español. ¿Cuánto tiempo lleváis pensando en este momento?
Es una idea que lleva en nuestras cabezas desde principio de año y durante estos meses la hemos ido masticando. Ha sido una decisión muy difícil pero muy meditada.
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P. ¿En qué últimos torneos podremos disfrutaros antes de cerrar el libro?
La semana que viene empezamos la segunda mitad de la temporada y, si las lesiones nos respetan y va todo bien, nos quedan unos 10-12 torneos. Viene una segunda parte del año muy intensa con apenas semanas libres de torneo. Trataremos de disfrutar y dar lo máximo de nosotras en todos ellos como siempre hemos hecho.
P. 32 títulos World Padel Tour, cuatro temporadas en lo más alto del ranking… ¿Qué balance hacéis de vuestra trayectoria?
La verdad es que a nivel deportivo se puede decir que lo hemos logrado todo. Quizá, la única “espinita” que nos puede quedar es no haber disputado unos JJ.OO.
Pero más allá de las victorias, triunfos o logros que hayamos podido conseguir durante estos años, nos quedamos con el camino que hemos recorrido juntas. Nos sentimos orgullosas de haber aportado nuestro granito de arena a este deporte y nos satisface leer que a la gente le ha llegado los valores que siempre tratamos de transmitir como el sacrificio, el esfuerzo, la unidad, el compañerismo, el fair play…
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P. Imaginamos que no será sencillo encontrar un único momento especial, pero os lo queremos poner un poco difícil. ¿Hay algún partido, algún torneo, que sea más especial que el resto por algún motivo?
Como dices, hay muchos momentos especiales porque son muchos años los que hemos estado jugando y compitiendo a pádel. Pero si nos tuviésemos que quedar con uno solo, sería el primer torneo que ganamos en 2013 (Barcelona) por todo lo que supuso. En este torneo ganamos a las que entonces eran número 1 y no perdían un partido hacía mucho tiempo (Carolina Navarro y Cecilia Reiter). Esto hizo que en nuestra cabeza saltase un click para creer en nosotras y pelear por llegar a lo más alto.
P. ¿Cuáles son vuestros futuros proyectos? ¿Tenéis pensado seguir ligadas al mundo del pádel?
Lo único claro que tenemos es que queremos volver a Zaragoza, queremos volver a casa. En lo personal, a las dos nos gustaría ser madres, formar una familia. En cuanto a lo profesional, todo está más abierto. No sabemos si seguiremos vinculadas al pádel o no, aunque nos gustaría. Lo que sí creemos es que, de alguna u otra forma, seguiremos ligadas al mundo del deporte.
Imagen principal de World Padel Tour
