Damos un paseo por Valladolid, una ciudad protagonizada por grandes monumentos, numerosas iglesias, gastronomía y literatura
Texto de Armando Cerra
¿Estás pensando en una escapada para un fin de semana largo? Pues te proponemos un destino que te sorprenderá: Valladolid. Esta ciudad de Castilla y León tiene más atractivos de los que imaginas. Es perfecta para hacer una escapada por España. ¿La conoces? Tal vez tengas la suerte de haber visitado las calles pucelanas. Si no es así, aquí te contamos qué ver en Valladolid.
La gran ventaja de un viaje a Valladolid es que hay mucho que ver y que hacer, pero prácticamente todo está cerca entre sí. Y además sus atractivos son variados ya que pueden estar protagonizados por grandes monumentos, por sus muchas iglesias, por la gastronomía e incluso por la literatura, ya que se trata de una ciudad vinculada a varios escritores como Cervantes, Zorrilla o Delibes. Por eso no te extrañes por su amplia oferta de visitas temáticas.
Un buen punto de referencia es la Plaza Mayor, sea cual sea el recorrido turístico por Valladolid. Es una plaza porticada que reúne en sí misma todos los atractivos pucelanos. Para empezar es un lugar monumental y hermoso, además habla de la historia de la ciudad con la imponente estatua del conde Pedro Ansúrez, y también aquí está el Teatro Zorrilla. Y por si fuera poco, tanto la plaza como sus aledaños son perfectos para buscar un buen bar donde degustar el taperío local o su famoso lechazo.
Luego el recorrido puede proseguir por calles peatonales e históricas como la de Santiago o la de Cebadería, que antaño era el lugar donde se comerciaba con la cebada y los cereales producidos en los campos castellanos.
Tras eso ya solo queda dejarse sorprender por el patrimonio local. Aparece en forma de maravillosas iglesias como la de San Benito que parece una fortaleza, la jesuítica de San Miguel y San Julián o la de San Pablo, situada en la plaza del mismo nombre donde está el Palacio de Pimentel, lugar de nacimiento de Felipe II. Por cierto, no es el único palacio vinculado con la monarquía hispana. También en Valladolid está el Palacio de los Vivero, reconvertido en Archivo Histórico Provincial, que fue el lugar donde se esposaron Isabel de Castilla y Fernando de Aragón. Y es que no hay que olvidar que incluso durante unos años Valladolid fue la capital de España.
Pero ni mucho menos acaban aquí las cosas que ver en Valladolid. Todavía faltan por conocer sus dos grandes templos, el museo más singular de la ciudad, su vieja universidad, la vieja plaza de toros que ahora es la Plaza del Viejo Coso y sus rincones bañados por el río Pisuerga.
En cuanto a las dos iglesias más emblemáticas, son la Antigua y la Inconclusa. La primera es la parroquia de Santa María La Antigua de rancio sabor medieval. Y la Inconclusa no es otra que la Catedral de la Asunción, que se pensó tan grande que nunca jamás llegó a terminarse. Aún así es impactante su valor.
También vinculado con el arte religioso se encuentra el Museo Nacional de Escultura, situado en el antiguo colegio de San Gregorio y que atesora una espectacular colección de imaginería hecha en madera policromada. No obstante, hay más museos en la ciudad, como los dedicados a Zorrilla y a Cervantes. E incluso uno de temática oriental.
Respecto a la Universidad de Valladolid, hay que recordar que es una de las más prestigiosas del país. Y también una de las más bellas, sobre todo por su sede, situada en la Facultad de Derecho, la cual te recibirá con una encantadora fachada barroca. Y eso no es más que la bienvenida, ya que dentro aguardan otras salas cargadas de saber, arte e historia.
Igualmente se respira historia en otros rincones de Pucela como la Plaza del Viejo Coso de forma octogonal y que se construyó en el siglo XIX para servir de plaza de toros, de hecho sus balcones eran palcos. Y en el mismo siglo se abrió el Pasaje Gutiérrez, ejemplo de galería comercial decimonónica, que se puede emparentar con otras de España, e incluso de Zaragoza.
Hay más cosas que ver como la arquitectura renacentista del Palacio de Santa Cruz, el esplendor natural del Campo Grande o la arquitectura de la calle Acera de Recoletos. No obstante, una visita a Valladolid no está completa si no se pasea a orillas del río Pisuerga. Y no solo pasear, también es posible refrescarse en la playa de las Moreras, formada en una ensenada del río.
Y tras eso hay que seguir caminando junto al cauce con destino a la Cúpula del Milenio. Un moderno edificio que se construyó por primera vez a orillas del río Ebro, con motivo de la celebración de nuestra Expo 2008. Tras eso se desmontó y se volvió a levantar en la ciudad castellana. ¡Si viajó todo un edificio!, ¿cómo no vas a hacer tú un viaje a Valladolid?
DÓNDE ALOJARTE EN VALLADOLID:
También te puede interesar:
