La zaragozana Sara Qiu ha recorrido 13 países y más de 11.700 kilómetros en bicicleta hasta llegar a su última frontera: China
Hoy os traemos un post diferente a lo que estáis acostumbrados. Un post sobre una zaragozana que quiso viajar de España a Asia en solitario. La bicicleta, su única compañera de viaje. Nos referimos a Sara Qiu, una española de origen chino de 32 años que, en abril de 2022, decidió lanzarse a recorrer el mundo en bicicleta. Sin destino, sin tiempos fijos.
En breves, cruzará su última frontera: China. El objetivo es llegar hasta el pueblo de sus padres, Qingtian, en enero de 2025, justo antes del inicio del próximo Año Nuevo Chino. Eso sí, desde entonces ya ha recorrido 13 países y más de 11.700 kilómetros. Toda una aventura dentro de su proyecto “Journey From the Road” con el que pretendía hacer un viaje hasta sus raíces.
Qiu ha atravesado el sur de Europa, los Balcanes, Turquía y ha seguido la ruta de la seda en Asia Central. Ha podido sostener el viaje gracias a la hospitalidad de las más de cien familias desconocidas que la han acogido en el camino y con quienes ha podido comprobar que la generosidad es una cualidad que nos identifica como seres humanos más allá de las nacionalidades o creencias.
Los comienzos
En diciembre de 2021, Sara decidió dejar su puesto de trabajo en una empresa tecnológica. Se cuestionó si realmente quería emplear su tiempo de esa manera y, desde entonces, no ha vuelto a mirar hacia atrás. El resultado ha sido una búsqueda personal y un viaje de autoconocimiento.
Desde los 23 años, su curiosidad la llevó a viajar de mochilera por varios rincones del planeta: Marruecos, Filipinas, Corea del Sur y del Norte, entre otros. Sin embargo, no fue hasta la llegada de la pandemia cuando comenzó a viajar de manera ‘lenta’. En 2020 hizo su primer viaje en bicicleta, de Zaragoza a Oviedo, unos 700 km. Desde entonces, y tras realizar numerosas aventuras, le ha llevado a viajar de Zaragoza a Asia.
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“Recorrer medio mundo sola y sobre una bicicleta me ha llevado a vivir todo tipo de situaciones, a convivir con la incertidumbre. He atravesado pueblos y ciudades, pero también muchas zonas montañosas y más de mil kilómetros de estepa y desierto en Asia Central. Está siendo un viaje lleno de lecciones. He aprendido a escuchar a mi cuerpo y mi mente, a saber parar y descansar, a reconocer cuando necesito espacio”, nos cuenta Sara Qiu. Además, desde su cuenta de Instagram nos muestra su historia a través de imágenes e historias.
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