Se estima que los más de 100 pinturas y grabados tienen una antigüedad mínima de 24.000 años y presentan una técnica peculiar
Investigadores de las universidades de Zaragoza y Alicante han descubierto el mayor yacimiento de arte rupestre paleolítico del este de la Península Ibérica. Y es que se trata de más de 100 pinturas y grabados de cerca de 24.000 años encontrados en la ‘Cueva Dones’, tal y como ha publicado la revista científica Antiquity.
La Cueva Dones es un lugar muy conocido en la zona y del que se tienen noticias de visitantes desde el s.XVIII. Sin embargo, la existencia de pinturas paleolíticas era desconocida hasta su descubrimiento en 2021 por parte de Aitor Ruiz-Redondo (Universidad de Zaragoza-IUCA), autor principal del artículo, Virginia Barciela González y Ximo Martorell Briz (Universidad de Alicante).
El número de motivos rupestres y la variedad de técnicas lo convierten probablemente en el conjunto paleolítico más importante del litoral mediterráneo oriental de la Península Ibérica. Y es que, desde que se descubrió Altamira en 1879, nunca se había encontrado un enclave de tanta importancia en el territorio.
Aitor Ruiz-Redondo, profesor de Prehistoria de la Universidad de Zaragoza, cuenta sus primeras impresiones: “Cuando vimos el primer uro [toro salvaje extinto] pintado, inmediatamente reconocimos que era importante”. Además, cabe destacar que en el este de la península se han documentado pocos yacimientos de este tipo.
El estudio incluye 19 representaciones animales confirmadas (ciervas, caballos, uros y un ciervo). Se trata de pinturas que destacan por una peculiar técnica: la mayoría de las pinturas se han realizado con arcilla. Quedan muchas zonas por prospectar, por lo que se prevé el descubrimiento de nuevos motivos durante los próximos años.
