Járaba, en la provincia de Zaragoza, es una villa termal donde salud y naturaleza se combinan en un espacio declarado de interés turístico en Aragón
La villa termal de Járaba se encuentra en la provincia de Zaragoza, junto a las Hoces del Mesa, a tan solo hora y media de nuestra ciudad. Tiene unos impresionantes cañones de verticales paredes calizas de más de 100 metros de altura, que prometen que esta escapada no te deje indiferente.
Paisajes kársticos esculpidos durante milenios por las aguas del Río Mesa y sus afluentes subterráneos que han ido moldeando el paisaje declarado Espacio de interés Turístico de Aragón. Las características geológicas de la zona permiten, además, una diversificación de las actividades a realizar en el municipio: senderismo, escalada, ciclismo, observación de aves….
No puedes perderte el Sendero interpretativo de la Hoz Seca, que en un recorrido circular de unos 6 km de longitud nos permite visitar su patrimonio cultural y etnográfico: Santuario, apriscos ganaderos, caleras, pinturas rupestres de Roca Benedí, .., a la vez de disfrutar de increíbles paisajes y gargantas.
Muchos manantiales de aguas termales y mineromedicinales surgen junto al rio Mesa. Aguas muy beneficiosas para la salud ya conocidas desde época romana como “aguas de las ninfas que ya fueron declaradas de utilidad pública en 1869.
En la actualidad las aguas de Jaraba emergen en numerosas surgencias que son objeto de diverso aprovechamiento:
- Plantas embotelladoras con marcas tan conocidas como Lunares y Fontecabras.
- Balnearios, Balneario de la Virgen, Balneario Serón y Balneario Sicilia, que convierten a Jaraba en una potencia termal que cuenta con el mayor porcentaje de termas por habitante de toda España. Balnearios creados a mediados del siglo XIX, declarados “Bien de interés turístico de Aragón”.
Se trata de aguas de mineralización media, bicarbonatadas, cálcicas, magnésicas, que emergen entre 30 y 34 grados de temperatura. Por sus propiedades están indicadas para diferentes afecciones de riñón y vías urinarias, del aparato locomotor, artrosis, reumatismos inflamatorios, secuelas postraumáticas, afecciones vasculares periféricas, varices e insuficiencia venosa, de las vías respiratorias, además de para curas de relax y estrés.
