Ubicado a 20 minutos de Teruel, el embalse de Arquillo se ha convertido en un lugar atractivo para pasar un día en plena naturaleza y disfrutar de sus aguas
¡Sí, Teruel tiene playa! O al menos una zona de baño que enamora a los vecinos de San Blas y visitantes. Nos referimos al embalse de Arquillo, un paraíso natural de aguas cristalinas que ha llamado la atención de Viajar, una revista española de viajes. Y es que la mayoría de españoles optan por hacer escapadas a ciudades costeras, pero el interior tiene mucho que decir. Es el caso del embalse de Arquillo, un lugar alejado de la masividad turística, pero que cada año recibe a miles de visitantes. Además, se encuentra en un lugar privilegiado, a tan solo 20 minutos de Teruel.
Se trata de un espectacular enclave rodeado de árboles y naturaleza donde un agua de color azul turquesa pone la guinda para una experiencia perfecta. Construido en el cauce del río Guadalaviar, cuenta con una superficie de 85 hectáreas y es un lugar perfecto para hacer una escapada por Teruel en el día. Un consejo si vas a ir con tu coche al embalse de Arquillo es que llegues temprano porque la zona de parking no es muy grande. Para los que vayáis a pasar el día, tenéis que saber que cuentan con merenderos en los que podrás disfrutar de tu propia comida. Otra opción será acercarse a una caseta-bar que ofrece diferentes bebidas y snacks.
Esta misma caseta también hace la función de puesto de alquiler de las barcas a pedales. Además, los más aventureros tienen la posibilidad de lanzarse a practicar kayak o paddle surf. Por tanto, es frecuente que te encuentres con diferentes personas, barcas y canoas que llenan de color y vida este lugar.
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