Lo tuvo claro Augusto y lo tiene claro Amancio, algo tiene Zaragoza - Enjoy Zaragoza
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Lo tuvo claro Augusto y lo tiene claro Amancio, algo tiene Zaragoza

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Por Ángel Moreno Tena, director y fundador de Enjoy Zaragoza

Les separan 2.000 años y es complicado encontrar similitudes, pero posiblemente la única cosa, comprobada, que tengan en común el emperador más influyente del imperio más importante de la historia y el empresario español más relevante es que ambos supieron ver el potencial de Zaragoza.

El primero funda la ciudad en pleno proceso de reorganización de las provincias del Imperio y no solo le da un papel protagonista sino que fue la única en contar con el privilegio de ser bautizada con el nombre del Emperador.

El segundo, propietario de uno de los principales grupos textiles a nivel mundial, eligió Zaragoza como su principal hub logístico siendo la ciudad una pieza clave en el éxito de la empresa.

No ha habido en estos 2.000 años un episodio de la historia de la actual España donde la ciudad no haya tenido un papel destacado e influyente.

Zaragoza ha sido SIEMPRE, y lo ponemos en mayúsculas porque ha pasado tanto con los romanos, visigodos, musulmanes, durante el Renacimiento como en la Edad Moderna y Contemporánea, uno de los más importantes centros comerciales de la Europa occidental.

Ser durante dos milenios un cruce de caminos han convertido a Zaragoza en un lugar único donde, sin irnos más de 100 años atrás, aquí se ha inventado la olla exprés, la placa de inducción o la fregona, creaciones que revolucionaron el mundo. Y todo esto sin salir de cocina.

Pero si te vas al cuarto encuentras que los tres principales fabricantes de colchones españoles son originarios de Zaragoza.

Que toda una generación de medio mundo ha crecido con juguetes de Imaginarium y comiendo Conguitos y Lacasitos y si nos manchábamos nos lavaban la ropa en una lavadora Balay.

Vamos a creernos lo que somos y donde estamos porque tenemos 2.000 años de ventaja.

Y de defender lo nuestro sabemos un poco porque nadie defendió nunca su ciudad como lo hicieron los zaragozanos en Los Sitios.