Uncastillo cuenta con una riqueza patrimonial e histórica y un entorno natural capaz de dejar boquiabierto a cualquiera
Cuenta con un gran repertorio de iglesias románicas que poseen arquitectura y escultura de los siglos XII y XIII
Texto: Armando Cerra – Imágenes: Turismo de Aragón
Uncastillo es uno de los pueblos de la provincia de Zaragoza con mayor atractivo. Primero por su evidente riqueza patrimonial e histórica, la cual ya está presente en el propio topónimo de la población. Pero también por un entorno natural capaz de dejar boquiabierto a todo aquel que no lo conozca. ¿Quieres descubrir los motivos para prepara una próxima visita a Uncastillo? Pues aquí te los contamos.
Ya os hemos hablado con anterioridad de los sitios de visita imprescindible en la Comarca de las Cinco Villas. Y obviamente la localidad de Uncastillo aparecía en nuestro listado de must see. Pero eso solo era un avance, un simple aperitivo de lo mucho que hay que ver en Uncastillo. Un lugar donde el manido de tópico de “viaje a la Edad Media” se hace real. Y es que el muestrario de arte románico (y también algo de gótico) es espectacular. Vamos a darle un repaso.
Desde la lejanía ya se aprecia ese valor monumental, y es que la silueta de la localidad es inconfundible. De forma especial por la figura del castillo sobre la Peña Ayllón que le da nombre. Cuando hagáis esta escapada a Uncastillo que nadie se pierda ascender hasta este punto, ya que es el mejor lugar para contemplar las vistas del entorno y disponer de una vista cenital de la propia localidad.
Pero además de las vistas que nadie se pierda la Torre del Homenaje, que se eleva rotunda y orgullosa en este punto desde el siglo XIII y que ahora alberga una interesante exposición sobre la vieja fortaleza medieval. ¡Ah!, y tras la salida acercaros a la cercana Torre Vigía, algo más moderna y esbelta, y es que formaba parte de una elegante palacete gótico del que solo queda algún muro en pie.
Aunque lo cierto es que para llegar hasta el castillo hay que atravesar todo el pueblo, os recomendamos empezar por ahí la visita y luego ir descendiendo por el laberíntico callejero de Uncastillo y así os iréis topando con el resto de sus monumentos.
Por ejemplo, vamos a recorrer una de las juderías que todavía se conservan por tierras aragonesas. Y desde luego vamos a alucinar con el repertorio de iglesias románicas que hay en tan poco espacio. Pocos lugares pueden presumir de semejante muestrario de la arquitectura y escultura de los siglos XII y XIII.
Un buen ejemplo es la iglesia de Santa María. Que no os engañe su torreón más propio de un castillo gótico. Lo cierto es que este templo tiene un conjunto de esculturas románicas en sus portadas sencillamente excepcional. Y algo muy similar se puede decir de la iglesia de San Martín de Tours, la cual además se ha reconvertido en Centro de Arte Religioso del Prepirineo.
Los amantes del arte medieval están de enhorabuena con esta excursión a Uncastillo ya que verán más ejemplos de arquitectura románica en los templos de San Juan, en el de San Lorenzo y en el de San Felices. Cada uno con su peculiar estado de conservación y con muchos cambios a lo largo del tiempo. Lo que no verán será la portada esculpida de la iglesia de San Miguel. Una joya que está muy lejos de aquí, ya que se desmontó hace décadas piedra a piedra para cruzar el Atlántico Y al otro lado del charco permanece. ¿La querríais ver? Pues tendréis viajar hasta el Museo de Bellas Artes de Boston.
No obstante, durante el paseo por Uncastillo no todo son iglesias. Que nadie se pierda la foto de la fachada del Ayuntamiento o la visita a su encantadora Lonja. Un ambiente que se originó como hospital en el siglo XIII, pero luego pasó a tener un uso más comercial, de ahí su nombre. Aunque a lo largo de la historia también ha sido vivienda y tras mucho tiempo en ruina, hace unos cuantos años que recuperó su esplendor como espacio idóneo para todo tipo de eventos culturales.
En definitiva, que el paseo por el lugar es de lo más interesante. Pero que nadie piense que esto acaba aquí. Que lleve buen calzado porque todavía puede visitar alguna cosa más por el entorno. Para empezar hay que decir que el término municipal de Uncastillo es muy amplio y por su extensión circulan varios senderos. Caminos perfectos para disfrutar de una excursión por estos paisajes del Prepirineo.
Pero aunque los bosques y la naturaleza de estos parajes son una sorpresa, el patrimonio de Uncastillo sigue bien presente allá donde vayamos. Por ejemplo, si nos acercamos hasta las Torres de Sibirana, ya muy cerca de Luesia. O si llegamos hasta el yacimiento arqueológico de Los Bañales, un conjunto de época romana que está a 15 kilómetros de Uncastillo. De hecho, se encuentra mucho más cerca del núcleo de Layana. Por eso es una fabulosa parada antes de emprender la vuelta a casa tras esta intensa escapada por las Cinco Villas.
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