Todavía tienes tiempo para disfrutar de algunas escapadas de lujo para autoconvencerte de que te has ido muy lejos
Está bien, quizás las vacaciones no han sido como esperabas, tal vez no has podido ir ni a Salou a pasear por la playa y estás soportando el calor zaragozano estoicamente, vagando de terraza en terraza o refugiado bajo del aire acondicionado de tu salón. No te deprimas, todavía puedes hacer un simulacro de vacaciones sin salir de la ciudad. Aquí tienes cinco lugares donde gozar como si te hubieras ido a tu destino más soñado.
Una noche en el hotel Innside by Melia: reserva una habitación, no hace falta que sea la suite, porque son todas muy bonitas después de la espectacular reforma y actualización que le han hecho al antiguo Corona de Aragón, y pégate el gustazo de estar todo el día en su piscina tomando cócteles y disfrutando de las vistas. Puedes comer y cenar, por un precio bastante asequible, los platos individuales o para compartir de la cadena del restaurante Lateral.
Una cena en el Estrella Michelín más antiguo de Zaragoza, La Prensa: si sois de los que viajáis de vez en cuando para probar restaurantes con Estrellas Michelín de otras provincias, por qué no aprovechar para ir a los que tenemos en Zaragoza, especialmente a La Prensa, que ostenta este prestigioso galardón desde 2012. Y con razón, porque sus dos menús son exquisitos, tanto el Menú degustación de Tapas, 6 pases y 2 postres, por solo 70€; como el Gastronómico de Tapas, 8 pases y 3 postres por 95€. El disfrute que procura Marisa Barberá, nuestra cocinera más reconocida de Aragón, es inconmensurable. Y el maridaje de vinos a cargo de David Pérez, único en su sector.
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El Hotel Alfonso, con cena previa en el restaurante Absinthium: En pleno Coso, a la vuelta de la esquina de la calle Alfonso, que reconocerás que es la más bonita de Zaragoza con esa postal del Pilar al fondo, puedes disfrutar de las instalaciones del hotel Alfonso, con su solarium con vistas y su piscina súperagradable, y reservar previamente en el restaurante Absinthium (a unos metros del hotel), donde Jesús Solanas te hará un alarde de sus mejores propuestas gastronómicas y enológicas, incluidos los generosos de su sherry bar. Un lujo al alcance de todos.
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Cancook, el Estrella Michelín más joven de Zaragoza: También son jóvenes sus dos artífices, el chef Ramcés González y el maitre y sommelier Diego Millán, y sus propuestas creativas y vanguardistas. Te ofrecen tres menús a escoger, según la curiosidad y la capacidad personal, claro. A saber: Menú Esencia, 10 pases, por 62€; Menú Festival, 18 pases por 100€; y Gran Menú, 14 pases por 80€, cada uno con su Armonía de vinos de 40, 60 u 80€.
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El Chalet es uno de esos restaurantes con encanto de la capital en cuanto que, cuando entras, sientes que te has teletransportado a otro mundo. Incluso que vives en un estupendo chalet, ahí aislado del mundanal ruido, sentado cómodamente a la fresca en su patio interior, y con un servicio muy profesional que te dará elegir entre su amplia carta y sus menús de 35, 45 y 55€, con múltiples opciones a escoger, a cuál más deliciosa, sobre todo no te pierdas su especialidad en steak tartar. También cuenta con una bodega muy interesante.
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